Compuesto por la narrativa de no ficción, la escritura ecológica y la poesía, Cartografías es una carta de amor a una tierra adoptada y a los compañeros u2014humanos, caninos, arbóreos y marinosu2014 que cohabitan el mundo de la autora. Con una voz que evoca Aves migratorias de Mariana Oliver o The Sound of a Wild Snail Eating de Elisabeth Tova Bailey, Escobar ofrece una reflexión conmovedora y, por momentos, agridulce sobre la migración y la pertenencia, las relaciones humanas y naturales, la vida y la muerte, y el lenguaje y la memoria. El mundo no humano, en la lengua lírica de Escobar, no es distante ni anónimo, sino que está profundamente enraizado, específicamente, en los Andes tropicales de Colombia y, sobre todo, las costas boscosas de la Columbia Británica. Desde los líquenes hasta los leones marinos, los colibríes hasta los osos, la prosa vívida de Escobar brinda vitalidad y agencia a su entorno más-que-humano, a la vez que transmite la fragilidad de la vida. Aportación conmovedora a las letras hispano-canadienses, la poética ecofeminista de Cartografías del bosque proporciona una meditación íntima sobre la migración y nuestras relaciones con el mundo natural.